La hora pactada era a las 21 hrs. Pero David Gahan y compañía salieron pasada la media de lo acordado. La emoción desde la estación Cd. deportiva ya se sentía… Depeche Mode regresaba a la gran Tenochtitlán.

Foto: Valente Rosas / EL UNIVERSAL

El ahora dúo Dave Gahan y Martin Gore fueron recibidos como se esperaba, un estallido de emoción luego de 5 años de ausencia en ese último concierto pero también algo de tristeza por el fallecimiento del tecladista Andy Fletcher.

Con una M gigante al fondo del escenario, la poderosa voz de Gahan y el talento en los sintetizadores y guitarra de Gore, comenzó la velada.

Las luces amarillas del escenario se encendieron y los 65 mil asistentes aplaudieron y gritaron sin cesar por más de dos horas.


“¡Los amo! ¡Son los mejores! ¡Los extrañaba!”, fueron los comentarios de los fans, que gritaron lo más fuerte posible para que el mensaje llegara al dueto.

“Muchísimas gracias. ¿Están listos, Ciudad de México?”, fueron las primeras palabras del vocalista. 

La fiesta se puso mejor gracias a la entrega de Gahan. Con el tema “Wagging Tongue” se quito el saco para rematar con un movimiento de rodillas al más puro estilo de Elvis Presley.

La velada se cerró con lo más clásico de Depeche Mode: “Enjoy The Silence”, para después salir y regresar en interpretar: “Just Can’t Get Enough”, “Never Let Me Down Again” y la icónica “Personal Jesus”.

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