Cuando Quincy Jones contactó a Eddie Van Halen para invitarlo a participar en “Beat It” de Michael Jackson, el icónico guitarrista pensó que se trataba de una broma y estuvo a punto de colgar el teléfono. Lo que parecía una llamada común terminó siendo una colaboración que cambiaría la historia de la música.

Eddie Van Halen, quien ya era conocido por su virtuosismo en la guitarra, casi pierde la oportunidad de participar en uno de los sencillos más icónicos de Michael Jackson. Según lo que narró el propio Van Halen en una entrevista, cuando Quincy Jones le llamó, su primera reacción fue gritar: “¿Qué quieres, maldito fulano?”. No fue hasta que Quincy explicó quién era que Eddie se dio cuenta de la magnitud de la llamada.

una llamada de Quincy Jones a Eddie Van Halen, llevó a uno de los solos de guitarra más icónicos de la historia.

Una vez que Eddie Van Halen llegó al estudio, la magia comenzó. Michael Jackson y Quincy Jones le dieron libertad creativa para reestructurar su parte en la canción. Eddie aprovechó al máximo esa confianza, llegando incluso a pedir a los ingenieros que reorganizaran la sección en la que tocaría su solo. El resultado: uno de los solos de guitarra más memorables de la historia del pop.

Van Halen confesó haber estado nervioso al mostrar su trabajo a Jackson. Sin embargo, Michael, impresionado por el nivel de dedicación y la pasión de Eddie, le agradeció por ir más allá de simplemente tocar su solo y realmente mejorar la canción. Este detalle subraya la relación creativa única que surgió de este inesperado encuentro.

A pesar del éxito de “Beat It”, no todos estaban felices con la decisión de Eddie. Su hermano, Alex Van Halen, expresó en entrevistas recientes que nunca estuvo de acuerdo con la colaboración, ya que el álbum Thriller de Michael Jackson opacó en popularidad al de su banda, Van Halen, en ese momento. Sin embargo, la historia sigue mostrando que el trabajo de Eddie en “Beat It” es uno de los más recordados en la música.

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