Ringo Starr, el legendario baterista de The Beatles, enfrentó uno de los momentos más agotadores de su carrera durante la grabación de “Helter Skelter”, un tema que se ha convertido en un emblema del rock más crudo y poderoso del cuarteto de Liverpool. Esta icónica pista, lanzada en 1968 como parte del White Album, no solo desbordó energía, sino que también dejó huellas físicas en Starr: las ampollas en sus dedos, inmortalizadas por su grito al final de la canción.
La historia detrás de “Helter Skelter” comenzó como una respuesta a un comentario de Pete Townshend, guitarrista de The Who, quien afirmó haber creado el tema más ruidoso y atrevido del rock. Inspirado por esto, Paul McCartney decidió llevar a The Beatles a un terreno más salvaje y experimental, dando vida a una canción que desafiaba las fronteras del género y, de paso, la resistencia de la banda en el estudio.
Ringo Starr y las ampollas que le dejó “Helter Skelter”

Durante las sesiones de grabación, los Beatles buscaron capturar un sonido crudo y visceral. McCartney, obsesionado con lograr que cada elemento del tema fuera más intenso, llevó al límite a Starr, quien golpeó la batería con una fuerza descomunal en cada toma. Al final de la grabación, exhausto y con las manos lastimadas, Ringo exclamó la frase que quedó registrada en el tema: “I’ve got blisters on my fingers!” (¡Tengo ampollas en los dedos!).
El resultado fue una canción que marcó un antes y un después en la discografía de la banda, destacándose por su espíritu rebelde y su influencia en generaciones de músicos. “Helter Skelter” no solo se convirtió en un himno del rock más enérgico, sino también en un testimonio del esfuerzo y la pasión que caracterizaba a The Beatles en sus momentos de máxima creatividad.

La intensidad de la canción inspiró a numerosos artistas a reinterpretarla, desde Mötley Crüe hasta U2, consolidando su legado como una de las piezas más icónicas de la historia del rock. Para Ringo Starr, “Helter Skelter” no solo fue un desafío físico, sino también un reflejo de su capacidad para adaptarse a los cambios musicales de la banda, demostrando su talento y compromiso como baterista.
Hoy en día, esta pista sigue siendo un referente indiscutible, tanto por su fuerza sonora como por las historias que la rodean. Y, en el centro de todo, permanece Ringo Starr, quien con su energía y dedicación, ayudó a transformar “Helter Skelter” en un clásico eterno.