El metro de la Ciudad de México es uno de los más grandes del mundo, y por lo tanto tiene su historia. Aquí te dejamos algunas de las más escalofriantes que se han convertido en mito y la gente continúa alimentando el misterio.
1. Cuatro Caminos no es la última estación.
Se dice que más allá de la estación Cuatro Caminos, que se supone es la última de la línea dos, hay una estación llamada Transmisiones Militares, la cual se encuentra dentro del Campo Militar Número 1, por el antiguo Toreo.
Dicha estación se hizo para que los militares pudieran transportarse al Zócalo lo más pronto posible en casos de urgencia.
2. Muertos en Viaducto.
En la estación Viaducto mucha gente asegura que se escuchan gritos y lamentaciones por la noche. Algunos dicen que eso son las psicofonías y situaciones respecto al accidente de trenes ocurrido en esa estación en el año de 1975, el cual dejó varios muertos y varios heridos.
3. Línea Ocho.
Originalmente la línea 8 iba a terminar hasta La Raza, entonces se puso provisionalmente la estación Garibaldi. Esa línea tendría a las estaciones Peralvillo, Manuel González y Nonoalco entre ese tramo, pero el INH prohibió hacerlas ya que se dañaría la Plaza de las Tres Culturas.Hay gente que dice que las estaciones existen, que no sirven a la ciudadanía pero sirven al gobierno.
4. Observatorio.
La línea 1 fundada en 1988 iría hasta Observatorio, pero la estación no quedaba y se puso a Tacubaya como estación final, de igual manera, “provisional”. Siguió pasando el tiempo y la última estación no quedaba. Incluso se cambiaron los pictogramas donde se puede ver que las dos estaciones, Tacubaya y Observatorio, tienen la misma franja y la misma dirección, solo que nunca se usó.
Otros dicen:
Esta última estación sí existe y que nunca se llegó a su final debido a un derrumbe o sí funciona como una bodega. Lo cierto es que ahí está, existe y nadie sabe mucho de ella.
5. El búnker en Los Pinos.
Entre Auditorio y Constituyentes que pasan por la Residencia Oficial de Los Pinos se dice que existe un búnker, el cual se utiliza para el presidente y su familia en caso de contingencias o ataques.