Una complicada demanda interpuesta durante años por tres bandas en torno al famoso logo de la cara sonriente de Nirvana se ha resuelto ahora discretamente fuera de los tribunales.

La banda demandó a Marc Jacobs en 2018, alegando que el diseñador de moda infringió sus derechos de autor con una camiseta de la llamada colección Bootleg Redux Grunge que imitaba la imagen. Sin embargo, en lugar de los ojos tachados, la camiseta de Jacob presentaba las letras M y J. La palabra “Nirvana” sobre el rostro fue reemplazada por “Heaven” en una fuente similar.

Los abogados de Nirvana argumentaron en aquel entonces que el uso de la imagen era “intencional” para “asociar toda la colección ‘Bootleg Redux Grunge’ con Nirvana, uno de los fundadores del género musical ‘grunge’, para hacer más auténtica la asociación ‘grunge’ con la colección”.

Se decía que el fallecido líder de Nirvana, Kurt Cobain, había creado el logotipo original. Jacobs presentó una contrademanda en 2019, afirmando que se desconocía su creador. Su demanda destacó comentarios de declaraciones anteriores en las que los compañeros de banda sobrevivientes de Cobain admitieron que no estaban seguros de quién había inventado la carita sonriente.

Los abogados de Jacobs dijeron que “la aparente ausencia de cualquier persona viva con conocimiento de primera mano de la creación de la obra supuestamente protegida por derechos de autor en cuestión, junto con numerosas otras deficiencias en el Registro 166 que es la base de la demanda por infracción de Nirvana, son la base de la contrademanda presentada”.

Cómo se involucró un tercero

Robert Fisher, ex director artístico del sello discográfico de Nirvana, entró en la contienda legal. A principios de este año, presentó su propia demanda reclamando la propiedad de las obras.

“Durante 30 años, Nirvana ha obtenido enormes beneficios de las obras de Fisher mediante la venta de una amplia gama de productos”, dijeron los abogados de Fisher.

“Con la ayuda de un equipo de abogados y representantes, Nirvana pudo hacerlo sin compensación alguna para Fisher, reivindicando falsamente la autoría y la propiedad”.

Las tres partes han llegado a un acuerdo sobre la “propuesta de mediación” presentada por el magistrado Steve Kim. En la última presentación conjunta ante el tribunal no se han comentado otros detalles sobre el acuerdo. Los abogados de Nirvana, Fisher y Jacobs no han respondido de inmediato a las solicitudes de comentarios. Se espera que en las próximas semanas se llegue a un acuerdo definitivo.

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