En su nueva biografía Brothers, Alex Van Halen revela una de las anécdotas más extrañas y peligrosas de su carrera como baterista de la icónica banda Van Halen. Durante un concierto, mientras realizaba su famoso truco de tocar la batería en llamas, su brazo se incendió accidentalmente. Lo sorprendente de la historia no es solo el peligro inminente, sino la reacción de su roadie, quien, en lugar de apagar el fuego con un extintor, simplemente le dio un pulgar arriba y le dijo: “¡Se ve genial, hombre!”.
Este incidente ocurrió mientras Alex y su hermano Eddie se encontraban en pleno auge de su carrera, y Alex recuerda el momento con una mezcla de asombro y humor. “La llama está ahí y, ¡puff!, se va. Así es la vida, ¿no?”, reflexionó el baterista sobre su truco. A pesar del riesgo, esta experiencia quedó grabada en su memoria, no solo como un accidente, sino como una lección sobre lo efímero y peligrosa que puede ser la vida en el escenario.
Alex Van Halen revela una anécdota peligrosa y divertida sobre un incidente en el escenario que demuestra el lado más extremo del rock and roll.

El incendio en su brazo ocurrió cuando el líquido para encendedores comenzó a escurrir por su brazo mientras tocaba, lo que resultó en una llamarada inesperada. Afortunadamente, el espectáculo siguió y Alex no sufrió mayores consecuencias, pero la escena quedó marcada como un episodio que, según él, podría haber sido parte de una película de comedia negra. De hecho, este tipo de caos fue lo que hizo que Alex y Eddie Van Halen no disfrutaran de la famosa película This Is Spinal Tap, que parodiaba las desventuras del mundo del rock. Según Alex, la película no les resultó graciosa porque estaba mucho más cerca de la realidad de lo que el público pensaba.
Los hermanos Van Halen siempre han tenido una relación complicada con la película de 1984. Para ellos, las situaciones absurdas que se muestran en Spinal Tap eran demasiado reales y, aunque no siempre las compartían con su público, el caos que rodeaba a sus conciertos y el mundo del rock a menudo se sentía como una caricatura de su propia vida. Alex comentó que el público no tiene idea de todo lo que ocurre detrás del escenario, y en su biografía, destapa algunos de esos secretos que definieron la imagen de Van Halen en los 80.

Por supuesto, esta historia es solo una más de las muchas que Alex Van Halen ha vivido a lo largo de su carrera. Sin embargo, la anécdota del incendio en su brazo es un recordatorio de los riesgos y las sorpresas que pueden surgir incluso cuando todo parece estar bajo control. A pesar de todo, el show debe continuar, y para Alex Van Halen, el fuego nunca fue un obstáculo; siempre fue parte de la magia del escenario.
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