Lexi Jones, hija del icónico David Bowie y la supermodelo Iman, acaba de lanzar su primer álbum titulado Xandri, una obra que marca el inicio de su camino artístico independiente. A sus 23 años, la joven cantante ha decidido hablar desde la honestidad y la emoción, compartiendo en Instagram un poema que acompaña el estreno de su disco y en el que establece con claridad que su intención no es vivir a la sombra de su legendario padre.
“Soy la hija de una leyenda, pero soy más que solo su nombre”, escribió Lexi en un texto que ha tocado fibras entre sus seguidores y seguidores del legado Bowie. Con frases como “No soy una copia, no soy una sombra”, la artista plasma la complejidad de crecer con un apellido que pesa tanto como brilla. Lejos de evadir el tema, Lexi lo enfrenta con sensibilidad y firmeza.
Lexi Jones, la heredera del icónico David Bowie, irrumpe en la escena musical con su álbum debut “Xandri”

Su álbum debut Xandri se distancia del glam rock o de los estilos que definieron a su padre; en cambio, ofrece una propuesta fresca con tintes de indie pop, electrónica suave y letras introspectivas. El material, producido en colaboración con artistas emergentes de Nueva York, busca conectar con una generación que entiende el arte como un espacio de exploración personal, más allá de la fama heredada.
El poema también refleja los dilemas emocionales detrás de su proceso creativo. “No estoy tratando de llenar sus zapatos, solo estoy tratando de encontrar mi propia paz”, confiesa. Estas palabras son el núcleo de un proyecto que busca autenticidad, no validación. Lexi ha dejado claro que su intención no es competir con el mito de su padre, sino compartir su voz con honestidad.

Este pronunciamiento también recuerda lo que su madre, Iman, declaró en 2018, cuando rechazó propuestas para que Lexi incursionara en el modelaje solo por ser “la hija de David Bowie”. En lugar de seguir el camino que el mundo esperaba para ella, Lexi ha elegido el suyo: uno que combina arte, música y autodefinición.
Con Xandri, Lexi Jones no solo debuta como cantante, sino que alza la voz como creadora. Su primer álbum es más que música; es una declaración de independencia emocional y artística. En una industria que a menudo exige heredar tronos, ella prefiere sembrar su propio jardín.
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