En 1974, Paul McCartney desarrolló un concepto cinematográfico titulado provisionalmente Five and Five and One, en el que él y su banda Wings eran duplicados por extraterrestres que deseaban conquistar la Tierra. Según revelaciones recientes del libro The McCartney Legacy, Volume 2, escrito por Allan Kozinn y Adrian Sinclair, la historia comenzó con un simple esbozo del Beatle que derivó en una colaboración con Isaac Asimov.
La propuesta inicial de McCartney incluía alienígenas que cambiaban de forma y tomaban la apariencia de los integrantes de Wings. En contraste, el tratamiento de Asimov presentaba seres de energía que se comunicaban mediante ondas de pensamiento, encontrando en la música una clave para comprender las emociones humanas.
El bizarro proyecto cinematográfico de Paul McCartney que nunca llegó a realizarse
El proyecto fue archivado cuando McCartney rechazó el guion desarrollado por Asimov, quien más tarde señaló que el músico “no podía reconocer las cosas buenas”. A pesar de la interrupción, la idea refleja la creatividad sin límites de McCartney en un momento en el que experimentaba tanto musical como artísticamente.
En declaraciones recientes, Sinclair comentó que el tratamiento de McCartney parecía algo ideado por él y Linda McCartney “tras consumir algo muy potente”. Este dato, sumado a la mezcla de géneros y la colaboración con una mente maestra como Asimov, hace que este proyecto olvidado sea una de las historias más fascinantes del legado del Beatle.
Esta curiosa colaboración también arroja luz sobre cómo McCartney buscaba expandir los horizontes de Wings. La idea de un “supergrupo alienígena” capturando corazones y mentes a través de la música demuestra cómo McCartney nunca dejó de innovar, incluso más allá de la esfera musical.
Aunque la película nunca se realizó, el guion de Asimov sugiere que los extraterrestres se “afectaban extrañamente” por la música humana, utilizando la clave musical como una puerta para explorar emociones desconocidas.
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